Retroceder en el tiempo en las ruinas mayas

Atrapada en medio del contumaz impulso del progreso y los ecos de la tradición, la península de Yucatán se halla en una encrucijada. En una parte están los grandes u lujosos complejos turísticos de la ribera caribeña; mientras que de otro se halla las férreas tradiciones que enorgullecen a los mayas actuales y los templos y las pirámides levantados por sus antepasados y conservados hoy en yacimientos arqueológicos como los de Chichen Itzá, coba y Tulum el instante culminante de todo viaje cultural a Yucatán es un paseo.

De un día a Chichen Itzá. Denominado una de las “Nuevas Siete Maravillas del Mundo”, este yacimiento tiene altas pirámides Y varios cenotes dignos de visitar. Pero si el viajero quiere de verdad demostrar su valentía u ascender a una pirámide, lo más apto es encaminarse a Coba, donde vivirá aventuras al más puro estilo Indiana Jones.
A pesar de que las cercanas ruinas costeras de Tulum carezcan de igual relevancia histórica, sus amaneceres son incomparables.

Pero los tesoros precolombinos de Yucatán no concluyen aquí al manejar por el campo se advierten colinas allí donde no debería haberlas;
Son los restos de ciudades y centros religiosos mayas devorados por la selva merita la pena contratar un guía y dedicar una jornada a la exploración de estas reliquias milenarias.